Lago Mead

El Lago Mead surgió en los años 40 al construirse la Presa Hoover, una de las mayores obras de ingeniería de los Estados Unidos. Sus reservas de agua se canalizan a través de Nevada y el sur de California.

Actualmente, con más de nueve millones de visitantes anuales, el Lago Mead se ha convertido en uno de los principales destinos turísticos de los Estados Unidos. Su cercanía a Las Vegas ha sido un punto decisivo en este hecho.

Qué hacer en el Lago Mead

Hacer submarinismo, escalar, montar en moto de agua o pasear a caballo son algunas de las actividades más habituales en el Lago Mead. Para los que prefieran un plan más tranquilo, pueden simplemente disfrutar la vida animal y vegetal de las inmediaciones, alquilar un barco, o comer en sus múltiples merenderos. Con casi 900 kilómetros de costa, el lago satisface todo tipo de turismo.

¿Cómo llegar al Lago Mead?

Si queréis tener un primer contacto con el Lago Mead, lo mejor es contratar una excursión desde Las Vegas y aprovechar para visitar la Presa Hoover. Los precios comienzan a partir de 40 US$.

Si preferís aprovechar la excursión para pasar unos días en contacto con la naturaleza, la mejor opción será alquilar un coche para que podáis desplazaros a vuestro aire.